Este viaje de 4 días desde Marrakech al desierto de Merzouga y Ouzina ofrece una experiencia más completa para descubrir tanto la belleza del Sahara como las tradiciones auténticas del sur de Marruecos. El recorrido comienza atravesando el Alto Atlas por el paso de Tizi N’Tichka, visitando la famosa Kasbah de Ait Ben Haddou, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y continuando hacia Ouarzazate, el Valle de las Rosas y el pintoresco Valle del Dades, donde la primera noche transcurre rodeada de paisajes montañosos y kasbahs tradicionales.
El segundo día lleva a los viajeros hasta las espectaculares Gargantas del Todra, un paraje natural de paredes rocosas de 300 metros que fascina por su grandiosidad. Desde allí, el recorrido se adentra en las imponentes Dunas de Merzouga, donde se disfruta de un paseo en dromedario al atardecer y de una noche mágica en un campamento de haimas bereberes. Bajo un cielo estrellado incomparable, la velada se acompaña de cena típica y música en vivo, creando recuerdos imborrables de la vida en el desierto.
El tercer día revela el lado más auténtico y salvaje del Sahara con la visita a Khamlia, pueblo de origen gnawa conocido por su música ancestral, y la travesía por la mítica pista del Rally Dakar hasta llegar a Ouzina. Allí los visitantes comparten un almuerzo con una familia bereber, descubren grabados rupestres, disfrutan del oasis y contemplan la puesta de sol en las dunas del Erg Ouzina. Finalmente, el cuarto día incluye el regreso a Marrakech, atravesando Rissani, el majestuoso Valle del Draa y el Anti Atlas, concluyendo una ruta que combina historia, cultura, naturaleza y la esencia más pura del Sahara marroquí.
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